X Concurso Literario de Navidad del María Teresa, Alcobendas, 2023: El Camino de los Pastores

Tres niños juegan en la acera de la calle. Es la víspera de Nochebuena.

-Se hace tarde, ¿Regresamos ya a tu casa? -dice Caleb, el primer niño.

-No, deberíamos ir a la Catedral primero, quiero ver el nacimiento. -dice Haziel, el segundo.

-Es buena idea, seguro que tu madre lo entenderá. -dice Lázaro, el tercero.

-No, no, no y definitivamente no. Es muy tarde para estar paseando por ahí. Y ¿Por qué ir a una tonta iglesia por un belén? Es una aburrida maqueta llena de papel marrón y animales. -dice Caleb.

-¡¿Cómo te atreves a dar tan poco valor al belén?! -responde Haziel. -Es una hermosa representación de la ciudades de esos tiempos y de la Sagrada Familia, que siempre es lo más bonito.

Los tres se dirigen a la catedral del pueblo que estaba cerca. Caleb, molesto, está todo el rato atrás, refunfuñando y buscando razones para convencer a sus amigos a regresar. Mientras Haziel y Lázaro hablan de lo que significa la Sagrada Familia.

-Me parece muy bonita, la representación de María, José y el Niño Jesús. Se parece a mi familia.

-Tienes suerte, Lázaro de que tu familia sea tan buena contigo y entre ellos mismos. Tú sabes cómo son mis padres. Se pasan los días peleando por cosas sin sentido. -al terminar, Lázaro se queda callado por no saber bien cómo actuar ante esta situación y Haziel retrocede para hablar con Caleb

-Es el amor familiar, por eso es que quiero ir a la Catedral, Caleb. -dice Haziel. -Por muy aburrida y fea que se vea la maqueta, así es donde yo quiero vivir. ¿No te has pasado horas mirando el escaparate de la tienda de Zonko´s deseando uno de sus mejores juguetes? Yo hago lo mismo, ir a desear mi mayor sueño. Y este deseo sí se puede cumplir, sé que Jesús me escucha, y que Dios también. Ellos quieren que yo sea feliz. Al dueño de Zonko´s, el señor Zonko, le da igual si tu quieres un regalo, una piruleta o un perro. Él no te va a dar nada sin que tú le des dinero, el cual no tenemos. Yo quiero vivir en un buen ambiente familiar.

-¿Y no te parece que es inútil? Llevas rezando los 10 años que llevamos de vida y ellos siguen discutiendo como si fuese tradición.

-”La esperanza es lo último que se pierde”. -dice Haziel cuando, de repente, Lázaro se tropieza con una piedra grande, que lo hace caerse. Sus amigos van a ayudarlo.

-¿Puedes andar? -Pregunta Haziel, mientras su amigo, niega con la cabeza y hace muecas por el dolor.

-Pues regresamos a tu casa, te llevamos entre los dos. -ordena Caleb con mirada clavada en Haziel. Ambos amigos se echan los brazos de Lázaro a sus hombros y caminan una calle. Llega un hombre alto, con barba corta  y un pelo suelto, largo y liso, de un tono marrón. Se les hizo familiar. Al ver a los niños dijo:

-Chicos, es Nochebuena, no deberíais estar a estas horas por la calle, déjenme que les ayude con el herido. -alzó, con sus dos manos a Lázaro.

-Íbamos a la capilla, quería ver el belén para pedirle a Jesús una bonita familia, como la suya. -dice Haziel.

-¿Tus padres tienen problemas? Deberías hablar con ellos. Os llevo a vuestra casa y ahí hablamos con ellos, a ver cómo lo solucionamos. Un niño no debe pasar por esto.

 ¡Gracias! Señor… -dice Caleb.

-Jesús. Llámenme Jesús.